lunes, 14 de septiembre de 2009

Supongo que me va bien

Ya no tengo mi infancia
ni los amigos de entonces.
No, no tengo mi infancia
ni los amigos de entonces
pero aún me queda la voz
y puedo llevarla donde vaya.
Supongo, pues, que me va bien.

Nunca he tenido dinero
pero aún me las apaño.
No, nunca he tenido dinero
pero aún me las apaño.
Muchas veces he cedido
pero nunca me incliné ante nadie.
Supongo, pues, que me va bien.

Problemas, problemas
se ciernen sobre mi mente.
Problemas, problemas
se ciernen sobre mi mente
pero los problemas del mundo, Señor,
son mucho peores que los míos.
Supongo, pues, que me va bien.

Nunca he tenido ejércitos
que se cuadraran bajo mi mando.
No, nunca he tenido ejércitos
que se cuadraran bajo mi mando
pero no necesito ejércitos
porque tengo un buen amigo.
Supongo, pues, que me va bien.

Me han pateado, azotado y pisoteado;
me han disparado igual que a ti.
Me han pateado, azotado y pisoteado;
me han disparado igual que a ti
pero mientras el mundo siga girando
yo seguiré girando también.
Supongo, pues, que me va bien.

Mi camino puede ser abrupto,
con piedras que me cortan la cara.
Mi camino puede ser abrupto,
con piedras que me cortan la cara,
pero algunos ni siquiera tienen camino
y han de estar siempre en el mismo lugar.
Supongo, pues, que me va bien.

No hay comentarios: